TRANVERZALIZAR EL VIH EN LA IGLESIA LUTERANA COSTARRICENSE
Cuando en el año 2005 se introdujo la idea de trabajar el tema de VIH y sida en la iglesia Luterana Costarricense, probablemente no se tenia muy claro como hacerlo y los retos que este iba a generar. Tal vez en ese momento solo se quería ser parte de la respuesta asertiva multisectorial del tema.
Cuando el pastor Magnus y la pastora Katarina asumieron el tema de VIH y sida, lo hicieron de la forma mas sabia. Ellos iniciaron como observadores de ONG`s de personas con VIH y de hogares (albergues) para personas con VIH, instituciones y personas relacionados con el tema. Para así poder elaborar la propia pedagogía aplicar en la iglesia.
Una ves que termino la etapa de exploración y observación inicio una nueva etapa. En Esta nueva etapa se contrata a una persona con VIH, la cual trae grandes inquietudes con respecto a la forma oficialista de abordar el tema de VIH a nivel nacional. Para esta persona las ONG`s de personas con VIH y ONG`s que trabajan el tema son extensiones de un sistema de salud centrado en el medicamento antirretroviral y No en la persona. Para su criterio la prevención estaba siendo enfocada desde el temor y la culpa lo cual obstaculiza toda toma de decisión consiente y libre.
Paralelo a esto la iglesia Luterana Costarricense se ha vinculado a un proyecto internacional con una ONG de Brasil (GAPA-BAHIA) para hacer que el tema llegue a todas las comunidades de fe de la iglesia , así como que involucre a todos los empleados , aéreas y programas del quehacer cotidiano de la iglesia.
Ambos factores hacen que se inicie una serie de talleres de biosalud para personas con VIH. Muchas personas con VIH realizan los talleres y expresan su identificación con la iglesia luterana Costarricense y solicitan que una ves terminado los talleres, seguir reuniéndose en las instalaciones de la iglesia como grupo de auto poyo con el acompañamiento de los pastores y coordinador del programa.
Es en esta etapa es donde la Iglesia debe replantear su estrategia de acompañamiento, visto hasta este momento como mera acción observadora, y pasar a un acompañamiento mas profundo. Lo cual la llevan a reflexionar sobre el verdadero significado de acompañamiento desde la misma condición de VIH. Asimila que no es lo mismo acompañar, como una simple acción observadora desde la seguridad de una jerarquía exenta de situaciones de dolor, que un acompañamiento en la misma condición de exclusión. No es lo mismo caminar con zapatos en cuero pulido y acolchados que caminar con caites con correas ásperas. Se puede viajar por el mismo camino pero las circunstancias en las que se realiza la caminata hacen que el camino resulte diferente.
También replanteaba todas las acciones en los diferentes escenarios del VIH. Propone un enfoque teológico de prevención integral del VIH para todas sus aéreas.
Tratando de responder en los tres niveles de la prevención (primario, secundario, terciario).
Busca llegar con la información oportuna a toda su feligresía, simpatizantes y en escenarios nacionales, trazando líneas desde una sexualidad humana real, liberadora y gratificante.
Grandes obstáculos debe afrontar; tales como reflexionar teológicamente, liberando de prejuicios temas como la sexualidad, amor, familia, homosexualidad y todos sus matices. Debe responder al pedido de esta población seducida por sus discursos de liberación e inclusión. La iglesia esta consiente que no puede haber una verdadera inclusión si no bendice el amor entre estas personas.
La iglesia Luterana en su amor cristiano se deja seducir y olvida colocarse el condón y pocos meses después es diagnosticada como una Iglesia con VIH. Y este diagnostico la hace ser blanco de estigma y discriminación por muchas de sus iglesias hermanas y otros sectores. Exponiéndose a los mismos estigmas de sus poblaciones afectadas. Y las mismas acciones discriminatorias de exclusión producto de los prejuicios. Pero estas situaciones la hacen convertirse en una iglesia resiliente.
De esta forma aprende, entiende y experimenta las mismas situaciones de dolor y soledad.
La sexualidad en todas sus expresiones es un reto para la iglesia porque debe fundamentarse teológicamente en una prevención desde el amor.
En los años 2009, 2010 y principios del 2011 la crisis económica golpea fuertemente, y obliga a la iglesia Luterana Costarricense reducir su personal asalariado, y los recursos.
Esto ocasiona una recarga laboral a unos pocos lo cual obliga a responder a las necesidades mas inmediatas. Los temas transversales de la iglesia que requieren de procesos continuos se ven afectados drásticamente. Entre ellos el tema de transversalización del VIH y sida. Las comunidades de fe de iglesia están separadas por grandes distancias unas de otras y para la capacitación, traslado de sus líderes y lideresas se requiere de recursos económicos.
Lo cual hace que la iglesia deba hacer un alto en su caminar y trazar nuevas líneas de acción para poder seguir en su mensaje de liberación e inclusión en su opción por los las excluidos/as. Se reorganiza y toma nuevas fuerzas y retoma sus compromisos.
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